Saluda del alcalde
“No sabía yo entonces que aquel pueblo era el de Jorge Manrique y el de los Berruguete …/
… La solidez, robustez y persistencia de un pueblo español de lengua puramente castellana no me la dio
ningún pueblo como el de Paredes de Nava, en el que se veía que vivían los que habían obtenido
el pase para vivir otros cincuenta años en la sucesión de viajeros que van pasando por la vida.”
Ramón Gomez de la Serna, Automoribundia (1888-1948)
Paredes de Nava es un lugar especial. Podríamos decir que cualquier rincón de la Tierra de Campos castellana tiene una singularidad que arranca siglos atrás cuando acontecimientos trascendentales para la historia tuvieron lugar por estas tierras y lo que aquí ocurría tenía repercusión en el planeta.
Tiempos a caballo; de polvo, sudor y hierro, pero también de pintores, de poesía y de leyes…
Según consta en el archivo municipal, en documento original, en 1440 el Concejo de Paredes acuerda comisionar a alguno de sus miembros para que rindan pleito homenaje al nuevo señor de la villa, don Rodrigo Manrique, padre del mejor cantor de la muerte, Jorge Manrique.
Así que los Manrique levantan aquí su residencia y en sus estancias nació el poeta, el autor de las Coplas. El supo llorar la muerte de un modo inolvidable. Y lo hace por su padre, Don Rodrigo Manrique, primer Conde de Paredes de Nava.
Don Rodrigo es el hombre más grande de su época y es nombrado en 1465 Condestable de Castilla por los Reyes Católicos, lo que equivalía a la jefatura suprema del ejército. En su tumba su epitafio dice: “Aquí yace un hombre, que vivo queda su nombre”. A él le dedica sus Coplas Jorge Manrique.
”Amigo de sus amigos,
¡qué señor para criados
e parientes!
¡Qué enemigo d’enemigos!
¡Qué maestro d’esforçados
e valientes!
¡Qué seso para discretos!
¡Qué gracia para donosos!
¡Qué razón!
¡Qué benino a los sujetos!
¡A los bravos e dañosos,
qué león!”
Y al poco tiempo llegará el pintor Pedro Berruguete y realizará el que seguramente sea el mejor retrato de Castilla, el Rey David de la Iglesia de Santa Eulalia. Es la época en que el arte circulaba entre Flandes, Italia y Castilla. Su hijo será Alonso Berruguete, el gran escultor nacido también en Paredes y cuya obra llena el Museo Nacional de escultura de Valladolid.
«Alonso Berruguete no es hijo de Pedro Berruguete, sino del Laocoonte»
José Moreno Villa
Una época de esplendor que dibujó el trazado de las calles, el perfil de las torres en el horizonte y nos permite hoy ver nuestro futuro de otra manera. Hoy Paredes es un buen lugar para disfrutar, para trabajar, para vivir.
Paredes de Nava le va a sorprender, es un sitio diferente en el que tras pasear por su casco histórico y conversar con sus gentes seguro que desea volver.
Goytisolo decía que él era de nacionalidad cervantina. Como alcalde de este lugar mítico, cargado de magia, sobrado de horizonte, les tengo que decir que nosotros somos de nacionalidad manriqueña, quizás el hecho diferencial de Castilla sea Manrique.
Bienvenidos a Paredes de Nava.
Fdo: Luis Calderón Nágera. Alcalde de Paredes de Nava